La lectura abre las puertas a mundos mágicos, estimula el pensamiento y la imaginación, entre otros beneficios. A menudo, las familias encuentran dificultades para fomentar el hábito de la lectura en los niños y niñas, la clave está en fomentarlo desde un primer momento y ayudar a que se desarrolle el hábito organizando espacios adecuados y motivadores para ello.
La importancia de un espacio de lectura en casa para niños y niñas
Si queremos que un niño/a lea, que tenga interés y motivación por los libros, no es necesario esperar a que empiece a leer y escribir, podemos hacerlo desde un primer momento. Al igual que muestran interés por sus juguetes y otros objetos que les acercamos, se trata de comenzar a acercarles libros y cuentos.
Tener un espacio o rincón para la lectura en casa, un lugar adecuado para ellos, con buena iluminación, con los libros y cuentos a su altura y al alcance de su mano, donde puedan sentarse o colocarse cómodos para ojear, para leer o mirar los dibujos, será la clave para que desarrollen el hábito y el gusto por la lectura. Cuando se crean estos espacios, el rato que pasan con los libros se convierte en un rato de placer y disfrute.
Cómo crear un espacio de lectura en casa para niños/as
- - Iluminación. La lectura precisa de una buena luz, sin una iluminación adecuada será difícil disfrutar de un buen libro. El primer paso antes de montar el rincón de lectura será pensar en el tema de la iluminación. Lo ideal es buscar la luz natural, por eso si podemos crear el espacio de lectura cerca de una ventana será la mejor opción; además podemos acompañar de lámparas y elementos necesarios que garanticen la iluminación cuando se vaya el sol.
- - Acceso a los cuentos-libros. Un espacio de lectura con difícil acceso a los libros o cuentos no invita a la lectura. Si los libros o cuentos no están a la vista porque están demasiado elevados o colocados dentro de un mueble o armario, será difícil que los niños/as se interesen por ellos. Los cuentos y libros suelen tener un formato atractivo con colores llamativos e ilustraciones motivadoras desde sus portadas, que los niños/as tengan a la vista estos elementos es algo esencial. En este sentido toca prestar atención al mobiliario donde coloquemos los libros-cuentos, existen diferentes opciones, la clave es que estén a su altura, que puedan verlos fácilmente y que puedan cogerlos. Una estantería en la pared, o un mueble giratorio, es igual, pero a la altura del niño/a. Olvidándonos de estanterías elevadas, o muebles cerrados.
- - Tipo de cuentos y libros. El siguiente paso es seleccionar el tipo de cuentos y libros. La regla ha de ser motivar al niño/a y despertar su interés. Es importante escoger una buena variedad de cuentos o libros, que sean indicados para su edad, y de temas que les llamen la atención. Una buena variedad es importante, si colocamos pocos libros o cuentos, es probable que se cansen rápido y pierdan el interés. Recuerda poner libros o cuentos bonitos, con colores e ilustraciones, estamos creando el hábito, también podemos incluir aquellos que el niño/a pida o demande.
- - Comodidad. El espacio/rincón para la lectura ha de ser un espacio cómodo, donde el niño/a pueda colocarse a leer o pasar las hojas del cuento con facilidad. Aquí también es importante el mobiliario, ajustado a su tamaño y cómodo. Sillitas o mesas a su altura, cojines, alfombras por si quieren leer en el suelo.
- - Decoración. La decoración es un elemento que no debemos olvidar, ya que puede ser clave para que el niño/a se introduzca en un mundo mágico. Según el espacio del que se disponga podemos añadir otros elementos como cortinas, que den un ambiente más íntimo, láminas, papel pintado, o juguetes.
- - Añade Materiales de Apoyo. Para hacer el espacio más completo, puedes incluir algunos materiales adicionales, como lápices y cuadernos, para que los niños puedan escribir o dibujar sobre las historias que leen. Además, pueden usar estos materiales para anotar palabras nuevas, escribir un pequeño diario de lectura o dibujar sus escenas favoritas.